Dicen que una imagen dice más que mil palabras. Y en un momento en el que, con fotomontajes trabajados, e inteligencias artificiales, uno ya no sabe qué creerse y se vuelve desconfiado, por doquier, por desgracia hemos de deciros que esta imagen es real y efectivamente lo que ven nuestros ojos es un perro detrás del volante de un coche.
La historia de la foto de radar del perro conduciendo
La fotografía que ilustra este artículo fue captada por un radar de tráfico, que identificó a un vehículo circulando a 61 km/h, excediendo el límite de velocidad, en la localidad eslovaca de Šterusy, al norte de Bratislava. La sorpresa que ha generado en las redes sociales no debe ser ni tan siquiera comparable a la que debió producir a los agentes de tráfico de la región de Trnava, que fueron los que además tuvieron que parar el conductor para identificarlo, buscar una explicación a lo que habían contemplado sus ojos, por qué había un perro aparentemente conduciendo el coche y, por supuesto, emitir la correspondiente sanción.
Según han publicado los propios agentes, que aseguran que la foto es real, el conductor de 31 años fue identificado. Su explicación, que el perro saltó sobre su regazo en el preciso instante que la cámara del radar de velocidad capto esta imagen (Carscoops). Una llamativa casualidad que, por otra parte, resulta más que creíble al hecho de que el animal fuera conduciendo. Los agentes procedieron a sancionar al conductor, imaginamos que por el exceso de velocidad, pero también por la temeridad de viajar con su animal suelto.
Cómo debemos viajar con un perro en el coche
Estos días, en los que entra en vigor la Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales, que prevé entre otras cosas las precauciones que han de tomarse con animales en vehículos estacionados, merece la pena recordar algunos de los consejos de la Dirección General de Tráfico para viajar con animales.
La normativa de tráfico no ha previsto, como tal, una serie de normas y prohibiciones al respecto de viajar con perros y otros animales. Pero Tráfico, que dispone incluso de un dossier sobre la seguridad vial y el perro, si recuerda que una mascota a bordo puede provocar situaciones que incurran en incumplir el artículo 18 del Reglamento General de Circulación, que atañe a la «libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción», habiendo previstas multas de hasta 100 euros.
De ahí que Tráfico proporcione los siguientes consejos, por la seguridad del perro y de los pasajeros:
- No viajar nunca con un animal suelto en el habitáculo
- Emplear un sistema de retención adecuado, como arneses y transportines
- No colocar objetos junto al animal
- Controlar el animal en las paradas de descanso, para evitar que salga corriendo
- No dejar al animal en el interior del vehículo con altas temperaturas, ni tan siquiera en zonas de sombra o con las ventanillas abiertas
- Realizar las paradas pertinentes, cada dos horas, para el descanso del conductor y del animal
- Ventilar adecuadamente el vehículo
- La correa no es un sistema de retención adecuado
No hay normas sobre ello pero si se aprecia que afecta a la seguridad (manejo de pedales, p. ej) puede ser sancionable.
Usa la cabeza y ponte calzado cómodo y seguro https://t.co/4pgykAM9VJ pic.twitter.com/K2X4Ui9dmQ
