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Sin duda, la noticia de las 100.000 unidades vendidas del Nissan Leaf provocan un enorme contraste con la que viene a continuación, el Renault Fluence Z.E. ya no se fabrica para Europa. El fabricante del rombo ha tomado esta decisión amparándose en el goteo de ventas que no justificaba su futuro.

El Fluence Z.E. salió a la venta siempre con alquiler de baterías, con la idea de que el sistema Better Place permitiese un intercambio y “recargar” en minutos. Esa aventura empresarial sigue sin despegar. El Leaf se ha ofrecido tanto con baterías en propiedad como en modalidad de alquiler (desde 2012).

Hablamos de una adaptación del Fluence convencional, no se diseñó como eléctrico desde el principio. Por eso hubo que alargarle el voladizo trasero para que entrasen las baterías en el maletero, y aunque es muy largo (4,75 metros) el volumen de carga es escaso. Para un coche urbano… mal asunto.

La idea en origen era buena, que sea un coche de aspecto más convencional, no una “nave espacial”, aunque tenía un tratamiento cosmético para diferenciarlo de un Fluence de los que tira humo. Pero se partió mal desde la base, no ha sido un coche que haya seducido a los clientes.

En el mercado de ocasión sus valores residuales son bajos, y muy variables. En Autoscout24 encuentro una unidad con el kilometraje más elevado (casi 30.000 km) por casi 14.000 euros, por ese mismo precio se puede sacar prácticamente nuevo, y eso que la tarifa oficial era muy superior.

En otras palabras, esto tiene que estabilizarse, y quien sea espabilado y no le importe que tenga el culo gordo, puede pillar un auténtico chollo. Mecánicamente a este coche le da igual tener 0 kilómetros que 30.000. En el entorno de los 10.000-13.000 euros tenemos unidades usadas y prácticamente a estrenar. Ningún particular se deshace del suyo, son concesionarios.

El año pasado realizamos una prueba de este coche, y se puede resumir en que tiene más o menos la misma autonomía que un eléctrico de características similares, pero con la pega de ser grande, no tener recarga rápida y que el alquiler de baterías va en el lote sí o sí.

En la misma Web de compraventa ninguna unidad supera los 15.000 euros. El PVP recomendado es 26.600 euros según la Web oficial de Renault. Benditas automatriculaciones, oiga. Con el tiempo estos coches pueden revalorizarse, hay muy pocos circulando, y aunque no ganará un concurso de belleza, su fiabilidad mecánica promete ser… rocosa.

En Coches.net el resultado es similar, aunque la unidad más cara está por casi 20.000 euros, 0 kilómetros. El más barato, agárrense, 9.000 euros con 3.000 kilómetros. Probablemente se pueda revender al mismo precio o más en un año o dos. Las leyes del mercado, con su mano invisible o ganvamizada ya lo dirán. Continue reading “Renault Fluence Z.E., ¿un chollo electrizante?”