Las ayudas a la compra de nuevos vehículos tienen, como objetivo común, la reactivación de las ventas en el sector automovilístico y el rejuvenecimiento del parque de vehículos español, que está bastante envejecido con las consecuencias en emisiones y contaminación que eso conlleva.
Si del Plan Moves para la adquisición de modelos electrificados ya hay comunidades, como Madrid y Barcelona, que han agotado sus presupuesto, en el caso del Plan Renove no está habiendo tanta suerte. Por el momento solo se han presentado 23.000 solicitudes que representan 28 millones de euros en ayudas. El presupuesto total del Renove este año era de 250 millones de euros, por lo que las subvenciones concedidas apenas suponen un 11’2% del total.
Tal y como han explicado en Europa Press, el plazo para presentar solicitudes al Renove acaba el próximo 31 de diciembre y ante la poca afluencia de peticiones el Gobierno está pensando en ampliar el plazo un mes más y dar tiempo a los posibles compradores para adquirir un nuevo vehículo.
Según fuentes de Faconauto, los 23.000 conductores que han solicitado una subvención son una pequeña parte de las 135.000 matriculaciones que, desdé el pasado 15 de junio, tenían opción a entrar en el Renove y cumplían los requisitos.
Las ayudas del Plan Renove pueden alcanzar una cantidad de 4.000 euros y pueden solicitarse para vehículos matriculados a partir del 1 de enero de este mismo año (en referencia a los de kilómetros cero de los concesionarios) bajo la condición de que se haya achatarrado un coche de al menos 10 años de antigüedad.
