La ley de la vida nos enseña desde pequeños que a medida que nosotros vamos haciéndonos mayores, nuestros abuelos, tÃos y padres van falleciendo. Poco a poco vamos perdiendo a todos aquellos seres queridos que son más mayores que nosotros.
Pero a veces los padres deben vivir con la carga de la muerte de su hijo. Algo que es antinatural y que cuesta muchÃsimo de llevar.
David Holmes de Norfolk, tenÃa 38 años cuando sufrió un accidente en moto que acabó con su vida. Un accidente que se grabó por completo en la cámara que llevaba puesta en el casco.
Brenda, la madre de David, entendió que ese vÃdeo tenÃa que dar la vuelta al mundo para que todos tomáramos conciencia de los riesgos de ser imprudentes y de no respetar las señales.
He leÃdo que la culpa fue la velocidad y que somos unos imprudentes. Si bien es verdad que la vÃctima iba demasiado rápido y que no respetó la señal de “slow†(despacio), el coche giró sin mirar y sin pensar que por el carril contrario podÃa aproximarse alguien.
Cada vez que salimos a la carretera debemos llevar mil ojos, pensar que los otros vehÃculos pueden no respetar sus señales, ir despistados o simplemente ser indiferentes a nuestra fragilidad.
Por ello es importante no solo ir permanentemente concentrados en la conducción sino asegurarnos de saber reaccionar correctamente y de ir totalmente equipados. Quizás no podamos esquivar a un coche que gira sin mirar a nuestro paso, pero estaremos más protegidos ante situaciones menos extremas.
Según la justicia inglesa ambos fueron responsables del accidente, David por exceso de velocidad y Holmes (el conductor del coche) por girar sin mirar, motivo por el cual fue procesado este abril.