Hace unos dÃas que el tiempo ha cambiado bruscamente en varias partes del paÃs, dando lugar a las imprevisibles tormentas de verano. Se pasa de estar soleado o ligeramente nublado a caer agua o granizo como si no hubiese mañana y eso es precisamente lo que pasó hace unos dÃas en Begur, una población de la Costa Brava.
Vemos en el vÃdeo como un vecino con la cámara a cuestas y aguantando las pedradas de granizos del tamaño de rodamientos sale corriendo a grabar la calle. Y allà está aparcado a la intemperie el protagonista de este Dolorpasión, un Lamborghini Gallardo Spyder con la única protección de lo que parece un acolchado de tumbona de color blanco en la parte delantera.
El granizo es un suplicio para los chapistas, gran cantidad de abolladuras de tamaño reducido en las superficies metálicas, más posibles daños en las lunas si los granizos son de calibre considerable. Vamos, que al propietario de este Lamborghini Gallardo Spyder le espera una buena factura en la reparación de los paneles de aluminio de su montura.
Afortunadamente recuperable, desafortunadamente un aparcamiento cubierto podrÃa haber sido suficiente para evitar estos daños.
Creditos: MPasion