Con este artículo ponemos punto y final a la selección de modelos que de aquí a finales de 2020 estarán en los concesionarios de toda España.
La división deportiva de Toyota, Gazoo Racing, ha desarrollado el Yaris más potente jamás construido. Y es que la presencia de la marca en el Campeonato del Mundo de Rallyes obliga a homologar un coche de serie que sirva de base para dicho certamen. Así, este “utilitario” se aleja bastante del Yaris tradicional, e incluso es diferente la plataforma.
Con carrocería únicamente de tres puertas, esta variante mide 4 metros de longitud, es decir, 5 cm más que el convencional, es 6 cm más ancho y más bajo y aerodinámico. La parrilla frontal es casi toda ella una toma de aire para refrigerar el motor, pero también destacan del exterior las llantas de 18 pulgadas, el alerón trasero y la doble salida de escape.
Por dentro son los asientos tipo bacquet (como se denominan los de competición), las costuras en rojo, las inserciones en aluminio y el logo “GR” lo que da pistas de que estamos ante un Yaris distinto y muy deportivo.
Del motor, que es de tres cilindros y 1,6 litros turboalimentado, se extraen nada menos que 260 caballos, y con él este GR Yaris puede pasar de 0 a 100 km/h en poco más de 5 segundos y alcanzar 230 km/h de velocidad máxima.
El propulsor del Yaris está asociado a un cambio manual de 6 velocidades y a un sistema de tracción total que reparte el par entre el eje delantero y trasero de forma automática según las necesidades. También se puede gestionar según los modos de funcionamiento, normal, Sport y Track, ya configurados. Dadas las prestaciones de este modelo, también se ha potenciado el equipamiento de frenos y la suspensión se ha endurecido.
Está previsto que el Yaris llegue al mercado en la segunda mitad del año, pero aún no se ha definido el precio que tendrá en España. Como referencia, en Alemania la cifra de partida está en torno a los 33.000 euros.
El popular modelo de la marca checa contará este año con una versión híbrida enchufable de su variante más deportiva, RS, tanto en su carrocería tipo berlina como en la familiar. Por fuera se distingue por las grandes tomas de aire, molduras en color negro, luces Led, llantas de 18 pulgadas y frenos de disco en rojo. Por dentro, lo que más llama la atención son los asientos deportivos, el volante achatado, los pedales en aluminio y el logo VRS.
Este modelo se encomienda a una mecánica gasolina 1.4 TSI de de 150 CV combinada con otra eléctrica de 85 kW para ofrecer una potencia final de 180 kW, el equivalente a 245 caballos. Con este sistema impulsor, que se asocia también a una batería de litio de 13 kWh y que puede funcionar en modo eléctrico durante aproximadamente 60 kilómetros –lo que le asegura la etiqueta “Eco” de la DGT–, acelera de 0 a 100 km/h en solo 7,3 segundos y consigue 225 km/h de velocidad punta.
Además de las excelentes prestaciones, llaman la atención las cifras de consumo y emisiones proporcionadas por Skoda: solo gasta de media 1,3 litros a los 100 km y emite únicamente 30 gr/km (ciclo WLTP), lo que le permite cumplir con la estricta normativa de emisiones EU6d que entra en vigor el próximo año.
De momento no se ha comunicado la fecha exacta de comercialización ni el precio, como tampoco los datos de equipamiento, pero sabemos que contará con instrumentación digital y todas las innovaciones tecnológicas y de seguridad del también recién renovado Skoda Octavia. Eso sí, la presencia de la batería hace que haya cierta pérdida de capacidad en el maletero, que no obstante se queda en 450 litros en el caso de la berlina y en 490 en el del familiar o Combi.
Uno de los modelos míticos de Volkswagen empieza una nueva etapa comercial estas semanas. Manteniendo la identidad que lo hace tan atractivo y exitoso, se ha sabido actualizar sin cambios radicales. El modelo convencional tiene carrocería de cinco puertas (ya no hay de tres) y mide 4,3 metros de longitud, y más adentrado el año llegará una familiar (Variant).
En principio, el lanzamiento está previsto con dos remozados motores gasolina TSI de 130 y 150 caballos, y uno diésel TDI también con 150 CV, todos con cambio manual de 6 velocidades excepto el alimentado por gasóleo, que tiene un caja automática DSG de 7 marchas. Sobre la base del gasolina de 150 CV también hay una versión de hibridación ligera (eTSI), que recibe la etiqueta “Eco” de la DGT y que igualmente dispone de cambio automático.
La gama se irá completando paulatinamente con nuevas mecánicas y las versiones deportivas GTI y la GTE híbrida (ambas con 245 caballos de potencia). No habrá versión cien por cien eléctrica, pues su “hueco” lo cubre el ID.3, el nuevo compacto sostenible de la marca.
Tecnológicamente viene cargado de novedades como cuadro de instrumentos digital, luces matriciales adaptativos, control por voz mejorado, Head-up display, sistema multimedia con pantalla de 10 pulgadas, paquete de servicios digitales We Connect y aplicación para móvil, entre otros elementos.
En materia de seguridad y ayuda a la conducción dispone de dispositivos como el detector de fatiga, control de crucero adaptativo, sensor de lluvia, conexión de luces automático, asistente de aparcamiento, sistema de reconocimiento de señales de tráfico y un largo etcétera. La oferta se estructura en torno a dos acabados, Life y Style, y el precio de partida es de 28.400 euros.
El SUV compacto de la firma sueca contará a finales de este año con una versión totalmente eléctrica, que además será la primera de muchas otras en virtud de la nueva estrategia de Volvo de producir vehículos con energía sostenible.
La estética no cambia mucho respecto a la variante convencional, aunque la parrilla frontal “tapada” es una de sus señas de identidad, mientras que el interior goza de mayor amplitud por la estructura específica que tiene como coche eléctrico. Aunque pierde algo de maletero respecto a modelos con motor térmico, la capacidad es de 413 litros, dispone de un cofre bajo el capó de 30 litros y otros huecos debajo de los asientos.
El XC40 Recharge P8 se impulsa mediante un sistema compuesto por dos motores eléctricos que actúan cada uno en un eje y proporcionan una potencia total de 408 caballos. Volvo anuncia que con esta mecánica la autonomía es superior a los 400 kilómetros, pudiendo recuperar un 80% de energía en 40 minutos en puestos de carga rápida.
En cuanto a equipamiento, la principal novedad es un sistema de infoentretenimiento con sistema operativo Android, lo que permite sacar el máximo partido a todo el “ecosistema” tecnológico de servicios de Google. Además, dispone cuadro de instrumentos digital y nuevos sensores para mejorar los sistemas de seguridad y ayuda a la conducción.
Todavía se desconoce el precio que tendrá en el mercado español, pero en otros países de Europa está a la venta por unos 60.000 euros.
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