El IPC es uno de los factores que afecta a la subida regular de los precios de los peajes, pero también lo son los porcentajes en concepto de compensación que corresponden a las concesionarias de las autopistas , por haber mejorado o invertido en el tramo que les compete o por el volumen de tráfico soportado, y que acaban afectando directamente a los bolsillos de los conductores que las recorren a diario. De cara al 2023, se espera que los precios de los peajes de las autopistas suban en lo que algunos consideran la segunda mayor subida del siglo, que no son palabras menores. Y es que, en algunas vías, el incremento del coste de los peajes va a ser de hasta el 9% en comparación con el precio actual.